-El estudio de mercado de Housell desvela además que tres de cada diez españoles tienen intención de vender su casa en el futuro cercano
Los datos del estudio de Barcelona muestran que uno de cada cuatro (24,8%) de los propietarios ha tenido algún tipo de interacción con el mercado para vender su propiedad desde 2021. De los propietarios que se han lanzado al mercado en los dos últimos años, cabe resaltar que el 40% ha terminado vendiendo su inmueble según el barómetro. El porcentaje de propietarios que ha pensado vender sin llegar a lanzarse al mercado es también resaltable; un 8,8% del total de entrevistados. Las causas de no llegar a materializar la puesta en venta pueden deberse a “la esperanza de encontrar un mejor momento en el mercado en el que vender por más precio, o simplemente la dependencia de otros tipos de factores como trabajo o familia” señala Guillermo Llibre, CEO de Housell.
A estos datos se suma un 2,7% de propietarios que lo han intentado sin éxito. Esta predisposición al mercado es similar en el resto de la provincia: un 1,9% ha vendido en estos dos años y un 3,8% ha intentado cerrar la compraventa sin suerte. De cara al 2023, se espera mayor movimiento en Barcelona ciudad: un 11,5% de los propietarios se plantea vender este año, frente al 9,6% del resto de la provincia.
Barcelona, junto a Madrid y otras ciudades como Ibiza o San Sebastián, lidera la clasificación nacional en precio de vivienda por metro cuadrado tanto en venta como alquiler. El estudio de Housell muestra una de las principales causas de este aumento de precios; la escasez de oferta de vivienda a la venta.
Preguntados por si se plantean vender, los propietarios de inmuebles de la ciudad condal indican que solo el 11,5% se lo plantea a corto plazo, frente al casi 31% medio a nivel español. “La situación de incertidumbre y posible bajada de precios hace recular a los vendedores, si bien es importante mencionar que no se espera una caída de operaciones ni precios acusada para 2023” señala Llibre.
“Ante la ralentización del mercado prevista a corto plazo, es importante seguir ofreciendo servicios competitivos, personalizados y que satisfagan a los clientes” señala Guillermo Llibre. En ese sentido, preguntados por las principales preocupaciones a la hora de iniciar el proceso de venta, los barceloneses lo tienen claro: quieren un servicio eficaz, económico y que facilite la transacción.
Un 57,5% considera como más importante para elegir una agencia inmobiliaria el precio del servicio, mientras que un 47,8% de ellos considera crucial la atención al cliente. En tercer lugar, un 46,9% de los encuestados considera de vital importancia un servicio que gestione las visitas de compradores. En cuanto a los motivos de venta, la mitad de los propietarios de la capital vende para comprar otra vivienda más adecuada o a su gusto, mientras el 11,5% lo hacen para invertir en otros productos y otros tantos para librarse de un préstamo o hipoteca.
Respecto a los servicios inmobiliarios, se observa un cambio en los gustos entre los habitantes de la ciudad y el resto de la provincia. Pagar solo por los servicios en el momento que son necesarios y tener el control (54,9%) y pagar un porcentaje de comisión en caso de venta (18,6%) son las fórmulas favoritas para los habitantes de Barcelona capital, mientras el resto de propietarios de la provincia coinciden en pagar por los servicios solo en el momento (42,3%), pero prefieren pagar un importe fijo al inicio y ahorrarse comisiones (28,8%).
Otro dato que se desprende del estudio de Housell si comparamos con años anteriores, es la preferencia a nivel nacional de los propietarios por contratar un servicio inmobiliario antes que vender por su cuenta. Si en 2019 solo el 38% quería vender a través de un intermediario, la llegada de la pandemia dio un vuelco al patrón debido al contexto económico y social: el 79% prefería contratar una inmobiliaria en 2020.
En octubre de 2021, las opciones se equilibraban de manera casi perfecta (el 51% prefería inmobiliaria para la gestión), pero los datos de febrero de este año muestran la apuesta por la confianza y seguridad de un agente inmobiliario (el 67% prefiere contar con un profesional). “Estos datos nos demuestran que en épocas de mayor incertidumbre económica como la que vivimos invitan a confiar en profesionales para realizar una transacción tan importante como vender un inmueble”, señala Llibre.
Los datos de Barcelona contrastan con la media de España, donde los propietarios tienen más intención de vender en un futuro cercano (31%) y un 16% ha interactuado con el mercado en los dos últimos años.
Otras cifras se alinean con esta idea de una mayor actividad a nivel nacional: el 14% de los entrevistados a nivel nacional ha intentado vender alguna vivienda en el último año. “En las grandes ciudades como Barcelona existe una oferta de vivienda menor ante su continuo aumento de población, lo que hace que las operaciones inmobiliarias sean más meditadas y un inmueble sea visto como un activo muy preciado” señala Llibre.
Acerca de Housell
Housell es la compañía tecnológica de servicios inmobiliarios que está revolucionando la forma de hacer negocios en el sector. Líder en venta de inmuebles, Housell combina la tecnología más innovadora con la experiencia de sus más de 80 expertos inmobiliarios a pie de calle para acompañar al usuario de principio a fin.Housell ha conseguido que la compraventa de una vivienda sea un proceso transparente y cómodo para sus clientes. Gracias a su plataforma, vendedores y compradores pueden negociar de particular a particular de forma rápida, económica y sin complicaciones.
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